Los bufetes británicos lideran el primer trimestre del ranking en asesoramiento de financiación de proyectos (project finance) en España de la plataforma TTR Data. Las oficinas españolas de Clifford Chance, Allen & Overy y Watson Farley & Williams (WFW) coronan, por este orden, el podio por el monto de proyectos. Watson Farley & Williams encabeza la lista por número de operaciones (8), seguido de cerca por Clifford Chance (7) y, a más distancia, Linklaters (3).

La pelea por el oro en valor total del project finance se dirime a favor de Clifford Chance, con casi 2.625 millones de euros. Allen & Overy consigue la plata con el asesoramiento de dos operaciones que rozan los dos mil millones de euros (1.993,50), y el bronce es para WFW, con 862,40 millones. Linklaters sigue la estela de la locomotora con tres operaciones por valor de 800 millones. Por detrás, con una operación, Gómez-Acebo & Pombo (GA_P) con 350 millones de euros, seguido de Ashurst y DLA Piper (213), Hogan Lovells (203), Garrigues (162). Cierran el top 10, con dos transacciones, CMS Albiñana & Suárez de Lezo (145) y Squire Patton Boggs (110).

El volumen de actividad de los bufetes en este nicho mantiene la tónica del mismo periodo del año pasado. Así, Watson Farley & Williams, que capitaneó el ranking de 2023 con 32 operaciones, lidera el podio en este trimestre con ocho, un valor que está en la media.

La de 2023 fue la primera edición de un ranking que saca brillo al trabajo de las firmas legales en la financiación de proyectos con algunas de las partes con sede en España. Aún es pronto para saber si la foto inicial irá variando con la pugna en cabeza de otros despachos que se subieron al podio el año pasado, como White & Case, Cuatrecasas y Garrigues.

Transición ecológica

Los datos recogidos por TTR Data reflejan la apuesta por la financiación de proyectos de energía renovable, claves para la transformación ecológica del país. Marcela Chacón, portavoz de la plataforma, lo corrobora: “la transición hacia fuentes de energía más sostenibles se ha convertido en una prioridad, no solo en el país sino en el ámbito internacional, y esto se ve reflejado en el 87% de transacciones registradas, las cuales pertenecen al sector de energías renovables”. España, valora Chacón, “tiene un gran potencial para generar energía limpia”.

“El sector de las energías renovables es de largo el más pujante en España tanto en número como en volumen de operaciones”, confirma José Guardo, socio responsable del área de project finance de Clifford Chance.

“Hay un mercado de financiación de proyectos renovables boyante y que goza de buena salud, frente a un sector de infraestructuras que, de alguna forma, sigue arrastrando los pies”, corrobora Rodrigo Berasategui, socio responsable de project finance de WFW. Las operaciones, cuenta, están a la vanguardia: “Tenemos ya sobre la mesa operaciones de financiación de proyectos de hidrógeno, de biogás y de baterías”.

Para Verónica Romaní, socia de bancario y financiero y coordinadora de energía en GA_P, la novedad más relevante este año es que “hay operaciones en tecnologías distintas o en un mercado más ligado a proyectos basados en un concepto ESG [en inglés, medio ambiente, social y gobernanza] más general, incluyendo, por ejemplo, activos ligados al reciclaje, la economía circular, etcétera”. “También hemos visto que, por primera vez en años, se han activado algunas operaciones en el sector de las infraestructuras, por ejemplo concesiones para la rehabilitación de la red de transporte por carreteras”, agrega Romaní.

Sofisticación

La financiación de estos proyectos es muy compleja, por la cantidad de actores que intervienen (eléctricas, gasísticas, bancos, patrocinadores o sponsors, ...) y las distintas fases y elevados plazos de ejecución. En este contexto, las empresas buscan soluciones imaginativas asesorados por los bufetes, lo que amplía el abanico de opciones.

Uno de los productos más sofisticados actualmente son los denominados warehouse facilities. Como explica José Guardo, se trata de “operaciones donde se habilita una línea de crédito revolving a través de la cual se financian proyectos con un determinado perfil en estados anteriores a ready to built [RTB: listo para construir] o en dicho estado”. El dinero se reutiliza “una vez esos proyectos se refinancian cuando han completado la construcción”.

La ventaja de este tipo de operaciones para los sponsors, señala Berasategui, es que les permite “garantizarse unos términos y condiciones de financiación para acometer la construcción de grandes portfolios con importantes dosis de flexibilidad”.

Si bien, en financiación de proyectos renovables, asegura Vanessa Cuellas, socia especializada en energía e infraestructuras de Allen & Overy, “las estructuras siguen sosteniéndose sobre la base de las PPA [power purchase agreement, un acuerdo o contrato de compraventa de energía a largo plazo entre un desarrollador renovable y un consumidor]”. “Hay poco apetito por el momento por el riesgo merchant [riesgo sujeto a precio de mercado]”, afirma.

Perspectivas

La volatilidad de los precios de la energía puede dificultar algunas operaciones, señala Verónica Romaní. “Esto puede implicar que se ralenticen un poco los procesos o que se incrementen las vías de financiación alternativa”, apunta la socia.

En esta situación de incertidumbre de precios, agrega Rodrigo Berasategui, las operaciones pueden ir al ralentí: “Tardan mucho en cerrarse, en algunos casos, más de un año”, afirma. No ayuda, agrega, “la creciente litigiosidad por mor de la actividad de determinadas organizaciones ecologistas, los retrasos en la concesión de permisos o la falta puntual de recursos y rotación en determinados equipos”.

No obstante, el cielo está despejado de nubes en el horizonte para el project finance, aseguran los expertos consultados por CincoDías, que se fían del último semestre para cerrar un buen año. Así, José Guardo señala que la percepción a seis meses vista “es buena o muy buena”. Por su parte, Vanessa Cuellas reconoce que “el comienzo del ejercicio ha sido muy positivo” y confía en que la actividad aumente en la segunda mitad del año. Rodrigo Berasategui también espera “una segunda mitad del año muy animada” pese a las incertidumbres. Por último, Verónica Romaní prevé que en los últimos meses del año se cierren un volumen importante de operaciones.

Mejores operaciones

• Energía solar. El promotor Bruc Management Projects cerró en marzo la financiación de 617 millones de euros para la construcción de plantas de energía solar en España. En esta operación, Linklaters ha asesorado a los bancos y Allen & Overy al promotor. Por su parte, IB Vogt, asesorado por Clifford Chance, consiguió 378,6 millones para tres plantas fotovoltaicas en Segovia. Gómez-Acebo & Pombo asesoró a los bancos en esta operación. En tercer lugar, un proyecto de Alantra Partners (asesorada por Ashurst) y Solarig de siete plantas solares en Italia y España por 231 millones. DLA Piper llevó el asesoramiento de los bancos implicados.
• Energía eólica. Arjun Infrastructure Partners y Copenhagen Infrastructure Partners consiguieron una financiación de 415 millones de dólares para portfolio de activos de energía eólica en Aragón. Ambos promotores estuvieron asesorados por Watson Farley & Williams. Elawan Energy financió un proyecto por 162,5 millones. Por último, destaca una operación de Greenalia, que ha conseguido financiación para cinco parques eólicos en Galicia por 103,4 millones de dólares.

Source: Cinco Días - Espanha